1952 - Un escenario de progreso económico
en el que sobresalían en los hogares los
electrodomésticos cromados y los muebles ergonómicos, se creaban los primeros Wayfarer.
Nacía como un sinónimo de los tiempos
modernos, se transformaba también en un
símbolo de rebeldía, y terminaba marcando toda una época. Causó furor desde su lanzamiento y fue de uso obligado durante la década del ochenta. Con los años, se reinventó en distintas versiones, su estilo fue ampliamente imitado en todo el mundo, y logró vencer el tiempo ya que nunca pasó de moda y aún mantiene absoluta vigencia.
:: Siempre junto a la música ::
A pesar del extraordinario éxito que las gafas wayfarer lograron casi desde el mismo momento de su lanzamiento, finalmente fueron las estrellas de la música (particularmente, los rockers) quienes las convirtieron en símbolo de su inconformismo y en un verdadero objeto de culto. En combinación con una campera de cuero y jeans gastados, este modelo se convirtió en una especie de uniforme rebelde indispensable para salir a escena.
A mediados de la década del 70, empezaban a perder batalla por la popularidad entre los anteojos de sol, por lo que deciden insertarlo en más de sesenta filmes...
Esto logró consagrarlos con el musical The Blues Brother y supieron llevarlos desde Bob Dylan hasta Debbie Harry y Los Ramones, como ya estrellas del punk, que las lucían en sus actuaciones en los más emblemáticos clubes de Manhattan.
En los ochenta, megaestrellas como Madonna –con su look de encajes y medias de red- o Michael Jackson también escondían sus ojos detrás del modelo wayfarer.